Se desborda crisis migratoria en Matamoros

Daisy Verónica Herrera Medrano
Reportera

Al grito de “queremos estudiar” cientos de niños y niñas estuvieron por más de 14 horas apostados en las inmediaciones del Puente Internacional que conecta a Matamoros con Brownsville, los acompañaban sus padres y otros adultos que se dicen engañados por el Gobierno de Donald Trump, que les está reprogramando hasta en tres ocasiones distintas la resolución de su visa humanitaria.

Es el escenario que mantuvo cerrado desde temprana hora del jueves el puente nuevo internacional en Matamoros, pues una multitud cercana al medio centenar de migrantes intentó ingresar por la fuerza a Estados Unidos.

Los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza activaron el protocolo de cierre en el paso internacional y han desplegado agentes en toda la franja fronteriza entre ambas naciones.

Mientras tanto, el Alcalde de Matamoros Mario López y el delegado del Instituto Nacional de Migración, Segismundo Doguim Martínez, sostienen una reunión con una comitiva que representa a los migrantes para persuadirlos de que abandonen en su totalidad el puente internacional.

A esta hora, se ha liberado el cruce de vehículos pero el área de peatones sigue bloqueada por migrantes, hasta en tanto consigan un acuerdo con las autoridades municipales y migratorias.

A temprana hora un nutrido grupo de migrantes iniciaron protesta por la lentitud en las citas de asilo humanitario por parte de las autoridades norteamericanas.

Horas después arribaron el alcalde de Matamoros, Mario Alberto López Hernández y el delegado del Instituto Nacional de Migración (INM), Segismundo Doguim Martínez, quienes exhortaron a los migrantes a despejar el puente y permitir la circulación.

Inclusive ante el reclamo de falta de medicamentos y alimentos, el delegado del INM ofreció trabajo a los migrantes, pero ellos lo rechazaron, ya que dijeron su misión es llegar a Estados Unidos.

El Gobierno de Estados Unidos, a través de la la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, en lugar de brindar una solución, decidió posponer una vez más las citas para migrantes programadas para el jueves.

El Gobierno Municipal instaló baños y regaderas portátiles para los migrantes, mientras que los elementos de la Guardia Nacional, la Marina y la Policía Federal se mantienen a la expectativa sin intervenir.